Seguidores

miércoles, 19 de marzo de 2008

Mi tristeza...


Y ahí quedé, con mi corazón hecho jirones, destrozado,
mirando como se veía tu espalda conforme te ibas alejando…
.- ya no te quiero, perdóname por favor, ahora me voy porque no sé qué más decirte.-,
fueron tus últimas palabras, yo, con mirada fría, impávida te escuché parada frente a ti, haciendome la fuerte, dejando que pensaras que mi dolor no existe, que la vida continua como si no hubieras dicho nada, no lo notaste, pero empuñé mi mano tratando de detener una lágrima que desesperada esperaba en el umbral de mi ojo saltar a la suplica de tu lastima y rogar por una oportunidad mas.
Luego, al segundo que diste la vuelta, rodó por mi cara y la siguieron otras miles, tambaleándome, caminé a esa banca vieja que nos acogió en algún momento de felicidad, no habías caminado ni dos metros y te extrañaba una eternidad…
Han pasado algunas horas, y mi pecho está mojado de tanto llorarte de tanto llorar tu partida, de tanto llorar tu abandono, Dios, que dolor tan negro, que angustia tan interminable…hace frío creo, ya que las gentes corren apresurados a sus hogares, está oscureciendo y hay niebla, esta calle húmeda me refugia de la tristeza aplastante que tendré al llegar a casa y no encontrarte ahí, espero que seas feliz, lo deseo de verdad, para que este dolor que me has causado, valga la pena.




Lucrecia

1 comentario:

Unknown dijo...

La vida es asi con dolores, con alegrìas, con fugas, con amores. El amor viene y hay q acogerlo, a cualquier edad.

Besos, Julia

http://Juliesusfotosyescritos.blogspot.com