Seguidores

lunes, 17 de diciembre de 2007

Marta


Marta tomó la otra noche unas copas de mas y comenzó a recordar su pasado..., ese que la tenía sumida en una profunda depresión.

Comenzó a recordar tantos malos momentos junto a él, la forma en que le hablaba anulándola como persona, como mujer. Marta pasó muchos años con ese hombre, aguantando, soportando, esperando por un cambio, por un mañana mejor, ese que nunca llegó.

Entre copa y copa se dio cuenta que el problema no era él en sus recuerdos, el problema era ella.

Comenzó a recriminarse todo el aguante que tuvo, todo lo que soportó, los recuerdos de sus silencios luego de las humillaciones..., el vino comenzó a mezclarse con las lágrimas, si, Marta se dio cuenta que no se había perdonado nada de nada.

De pronto se vio en aquellos momentos reviviendo amargamente su historia, Marta miraba a su alrededor y veía entre lágrimas, el humo del cigarro, las colillas amontonadas en un viejo cenicero de cobre, la botella de vino y una casa vacía.

Hoy en la noche Marta salió en las noticias, nadie entendió lo que pasó, llevaba días sin vida..., testigos presenciales, la tristeza, la soledad, una caja de pastillas, una botella de vino y una copa de mas...
Lucrecia.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Las esperanzas son claras en la sencilles que escribes, muestra cambio de vida, el detalle es seguir ese camino sea cual sea el precio que tenga que pagarse...

El valor motivara tu alta voluntad, pues eso quieres descubrir y aplicarlo en ti...

Anónimo dijo...

Sorprendes! La originalidad temática,la sencillez de tu redacción rozando la inocencia; observación aguda del dolor, descarnado concepto descriptivo!!
Mario.