Seguidores

jueves, 22 de noviembre de 2007

La Micro


Esa mañana era una de tantas, de desayuno tomé una discusión con mi pareja, la taza llena de cuentas, mal sexo, plata que no alcanza y el pan relleno con el trabajo de mierda que tenemos que aguantar, después de salir casi arrancando de este infierno pasé a dejar a mi hijo al colegio y apenas tuve tiempo de llegar al paradero y tomar la micro.Lo que me imaginaba, sucia, llena y hedionda, este ataúd de metal pasaba una vez cada media hora, mala suerte la mía de vivir en la periferia de esta ciudad, los componentes de este circo eran mujeres con sus guaguas en brazos, estudiantes que descaradamente sentados simulaban leer un libro para evitar la mirada inquisidora de los adultos, personas con el pelo aun aplastado dibujando sin vergüenza la almohada recién despegada, los vidrios empañados con el aliento no dejaban siquiera distraer la vista en la calle mojada.Paraba, frenaba y aceleraba, luego carreteaba, uff, mis piernas flojas apenas soportaban mi cuerpo y con los ojos aun dormidos a pesar de la ducha fría por falta de gas, trataba de buscar un lugar en este enjambre mal oliente, crucé mi mirada con un par de ojos que me observaban entre abrigos, gorros y paraguas, me sentí nerviosa, pero a los segundos los olvidé, ya que pensaba sólo en buscar un rincón quieto para esperar llegar a mi destino; de pronto, ya en mi refugio, tratando de distraerme miré las caras de estos entes, y nuevamente esos ojos se cruzaron con los míos, pero esta vez me quedé en ellos, eran profundos, muy negros, me sonrojé nerviosa, casi esbocé una sonrisa, pero un frenazo lo impidió, luego, al buscar mirar su cara completa me incliné hacia delante, tocando y despertando a una mujer que dormitaba en el asiento frente a mi, me incorporé, disculpándome avergonzada.Era como una hembra buscando su macho, grande, imponente, con dientes blancos y pelo ondulado que dejaba caer un mechón en su frente, me miró como a una presa y sin reparos se acercó a mi, era alto, grueso, imaginé que era un obrero por su vestimenta, se paró a mi lado, apoyó su mano junto a la mía en el respaldo helado de un asiento, en un descuido sus dedos tocaron los míos, su mano era tosca y muy grande, su perfil no era muy lindo, pero tenía una nariz aguileña que de todas formas me pareció atractiva, de pronto me vi sintiendo un calor en todo mi cuerpo, un calor muy agradable se apoderó de mis partes intimas, hace años que no sentía eso, quería que me tomara, que me apretara a su cuerpo, que bajáramos corriendo y en algún rincón que me hiciera suya sin miramientos, sin preguntas, sin futuro o pasado.Las miradas seguían cruzándose sin disimulo, ya no me importaba la gente, las cuentas, las peleas, incluso mi hijo, de tener en ese momento la opción habría salidos corriendo sin culpas muy lejos junto a él, olvidando responsabilidades, reuniones de curso, fiestas familiares, discusiones, malos ratos, olvidándolo todo...Pasaron algunos minutos y en mi cabeza las fantasías iban y venían, sus manos, su cuerpo, y en un momento sin importarle dejarme sola se movió de mi lado, la micro iba aún mas llena y haciendo gala de una personalidad descarada se quedó parado justo detrás mío, el bulto que apoyó en mí era tan grande que creí acabar en ese instante, tuve que cerrar la boca para ahogar un gemido que por poco se escapa de lo mas interno mío .- Dios Mío.- susurré, a esas alturas creo que yo era la que empañaba aun mas los vidrios, se acercó mas aun, sentí una de sus manos jugar cerca de mis caderas, se inclinó hacia mi oído y susurró algo que no logré entender, y sin avisar se bajó corriendo aprovechando que alguien acababa de bajar, sin esperar que estuviera detenida totalmente saltó a mis recuerdos, perdiéndose entre las ventanas empañadas, yo, mequedé con su pelo ondulado y sus ojos negros, él, con mi billetera...
Lucrecia.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

ME gusto este relato, mucho más que los otros, esta bien construído, desde el principio al final. Te felciito por él.

APatric dijo...

Sinceramente, yo te hubiese susurrado al aído mi Nombre (Alvaro) y mi Nº de Celular (62610296)...jejeje.-

Pd: el final de la billetera lo encontré genial!!!...excelente escrito.